Hola a tod@s!
No escribí desde el jueves porque me salió un trabajo como canguro hasta hoy, así que aprovecho para hacer un artículo y comentaros la experiencia.
Podría hacer un post kilómetrico con cada anécdota, pero creo que mejor lo resumiré en puntos concretos:
– Para estar con niños, hay que tener vocación. En serio, todo el mundo cree que puede hacerlo, pero hace falta una paciencia y unos conocimientos adecuados (pedagogía, psicología y didáctica principalmente) y sobre todo saber que se está trabajando con personas.
– Todo aquello que se parodia en las películas de niñeras y niños super-rebeldes e imposibles… debo deciros que a veces se queda corto, jeje. Pero también he de deciros que la satisfacción que te da recibir un sincero cumplido de un niño o un abrazo cuando no te lo esperas hace que te olvides del resto.
– Si se rompen platos/vasos/cosas, etc… creedme, es lo más normal del mundo y hasta lo menos mal que os puede pasar.
– En cuanto al dinero y, por lo que he leído en ofertas de empleo de este tipo, es algo muy variopinto: depende de la zona en la que vivas, de si es de día o también noches, del número de niños, etc. Lo mejor es que os informéis sobre cómo está la cosa donde vivís antes de aceptar un precio.
– No todo es tan malo, jeje, sienta bien saber que estás cobrando mientras te dan la comida, ves pelis con los niños o juegas videojuegos.
Así que, mientras sale otra cosa o para un dinero extra, es algo que os recomiendo. Eso sí, como dije en el primer punto, valorad siempre la responsabilidad que conlleva.
Un saludo y mañana estaré de nuevo con vosotros en la rutina habitual =)
Desde luego tienes un par de webs, Suki. Yo creo que no estoy sicológicamente preparado para eso. Prefiero correr delante un toro 😉
Jajaja, gracias Aloe!!! En mi favor diré que soy de esas personas que, según el primer punto que puse, trabaja en esto por vocación 🙂 aún así no deja de ser difícil y conlleva gran responsabilidad.
Cada uno tiene una capacidad/valía para hacer algo, seguramente hay muchas cosas de las que tú haces de las que yo sería incapaz de hacerlas 😉