En la actual situación del mercado inmobiliario español uno se plantea si es mejor comprar un piso o alquilarlo. En cualquier de las opciones, uno puede decantarse por los pisos de Caixa Catalunya Inmobiliaria. En ella, el cliente puede optar por comprar o bien alquilar una vivienda.
En primer lugar, comprar una vivienda es una notable inversión a largo plazo. Las mensualidades de la hipoteca le obligan a ahorrar todos los meses. Además, dentro de varios años las cuotas de la hipoteca representarán menos dinero con relación a la subida general del coste de la vida, en tanto que los alquileres se actualizan cada año con el IPC y encima pueden dispararse cuando se tenga que renegociar su contrato o firmar otro nuevo.
Por otro lado, se encuentra la seguridad que le proporciona tener un techo propio, sin preocuparse de que el casero no le renueve el contrato o le suba el alquiler, y una vez pagada la hipoteca uno estará protegido ante cualquier adversidad económica. También si la casa es suya, podrá hacer las reformas que se quiera.
Todas estas son buenas razones para comprar una vivienda, pero en ciertos momentos puede ser una buena operación optar por el alquiler. Así, una vivienda en propiedad ata mucho. No se sentirá con la misma libertad si tiene que cambiar de residencia por razones familiares o laborales. Si no logra vender la casa con rapidez, se verá obligado a hacerlo por debajo de sus expectativas o deberá pagar dos hipotecas o una hipoteca y un alquiler. Toda una ruina.
Por último, el alquiler presenta una serie de ventajas. Ser propietario supone, además de las cuotas de la hipoteca, unos gastos que ni se recuperan ni aportan ninguna ventaja fiscal. Seguros de hogar, impuestos, mantenimiento y gastos de comunidad representan notables desembolsos. . Cuando se vive de alquiler, estos gastos suelen cubrirlos los caseros.
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